Un total de ocho animales de especies en peligro de extinción fueron decomisados por la policía ecológica de Juliaca y el personal de INRENA, tras una paciente labor de investigación. Los animales en cautiverio fueron encontrados en la cuadra ocho del jirón Moquegua de la zona de Túpac Amaru de Juliaca. Se incautaron tres osos perezosos y cinco iguanas. Los animales fueron encontrados a manos de un vendedor de sebos de animales identificado como Wiliam Canazas Carta de 24 años de edad, quien fue inmediatamente intervenido y a quien se le abrirá un proceso por tenencia ilegal de animales en peligro. José Rossell Cárdenas, especialista del INRENA, manifestó que los animales incautados se encuentran en peligro de extinción, por tanto están protegidos por la ley forestal terrestre. Indicó que los animales serán llevados a un centro de custodia temporal o a un zoológico, mientras se ve la posibilidad de insertarlos en su hábitat natural. Los animales en cautiverio fueron encontrados en condiciones deplorables, estaban encerrados al interior de dos cajas de cartón. Y aparentemente por el hacinamiento y la falta de alimentación, uno de los osos perezosos murió. Según la policía ecológica, las iguanas habrían sido traídas de Pucallpa o de puerto Maldonado. Se informó también que este es el segundo hallazgo que se realiza durante el año.
miércoles, 7 de julio de 2010
Inrena recupera 789 animales silvestres vivos comercializados ilegalmente
Rafael Ramírez, titular de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre, sección Lima, del Inrena, señaló que entre los animales recuperados también se encuentran 183 aves y 52 mamíferos silvestres. Estas recuperaciones fueron posibles gracias a la labor en conjunto realizada por el Inrena, el Ministerio Público y la Policía Ecológica, indicó. Refirió que la cifra total es similar a la registrada en el mismo período (enero-marzo) del año pasado, aunque hubo un incremento en el decomiso de reptiles y una disminución en la cantidad de aves. El incremento en la captura de reptiles no responde necesariamente a una mayor demanda de estos animales silvestres, sino a un aspecto de oportunidad, ya que depende de lo que se encuentre en las intervenciones sorpresivas que se realizan, explicó. Ramírez apuntó que una modalidad importante de tráfico ilegal es la taxidermia (animales disecados),utilizada en insectos, principalmente. “La legislación actual no hace distinciones, ya que están protegidos los animales vivos y los disecados”, precisó. El comercio de animales disecados en Lima se localiza, sobre todo, en los mercados artesanales, que carecen de autorización para esta labor y, sin embargo, ofrecen las especies taxidermizadas como souvenir. Las especies preferidas por los taxidermistas son arañas, mariposas, murciélagos e insectos diversos, los cuales son colocados en cuadros de madera, detalló. El comercio de animales está permitido, siempre y cuando se cuente con la autorización del Inrena y, para ello, se exige un Plan de Manejo que garantice la supervivencia de las especies. En ese sentido, el funcionario dijo que el Inrena busca formalizar el comercio de animales mediante el sistema de zoocriaderos, que en el caso de Lima son un total de 64 lugares dedicados a esta labor. Refirió que los zoocriaderos se clasifican en centros de rescate, dedicados a la investigación científica; centros de custodia temporal de animales en cuarentena; centros de reproducción de especies para su posterior comercialización autorizada; y zoológicos, donde las especies pueden ser observadas por el público y que, en el caso de Lima, son el Parque de Las Leyendas y el Centro Ecológico Recreacional (CER) de Huachipa.
Gobierno denuncia millonario tráfico de animales silvestres
Doscientos ejemplares de mariposas eran sacados del país. Cada una vale 340 euros en el mercado internacional.
El Gobierno denunció ayer el contrabando de mariposas y caballitos de mar de Bolivia y del Perú, respectivamente, para ser comercializados en grandes sumas de dinero en Canadá y países asiáticos.
El viceministro de Biodiversidad, Recursos Forestales y Medio Ambiente, Pablo Ramos, hizo pública la denuncia ayer en conferencia de prensa conjunta con el director de la Policía Forestal y Medio Ambiente, Jorge Vizcarra, y el presidente de la Empresa de Correos de Bolivia (Ecobol), Constancio Choquehuanca.
El primer caso se registró el 13 de diciembre de 2009, cuando un funcionario de Ecobol descubrió paquetes con al menos 200 ejemplares de mariposas nativas que estaban siendo traficadas de forma ilegal hacia Japón y Canadá.
Se calcula que una de estas especies se comercializa en el mercado internacional entre 310 y 340 euros, lo que motiva a los contrabandistas a incursionar en esta actividad, pese a que está penada por ley.
Ecobol dio parte al Viceministerio de Biodiversidad y luego se procedió a presentar la respectiva demanda ante el Ministerio Público.
El segundo caso está referido al tráfico de caballitos de mar traídos desde Lima (Perú) para enviarlos vía Ecobol a Taiwán y China, donde se los utiliza para el tratamiento de ciertas enfermedades.
El viceministro explicó que el hecho se registró el 13 de enero, cuando funcionarios de Ecobol encontraron un paquete con al menos 10 kilos de caballitos de mar.
El tercer caso data del 3 de febrero, cuando se confiscaron 3.500 caballitos de mar y se detuvo a un ciudadano peruano.
Ramos alertó sobre esta actividad ilícita y la amenaza que representa sobre estas especies el tráfico ilegal que “los animalitos que llegan son cada vez de menor tamaño, lo que significa que se está haciendo una cosecha de caballitos de mar de forma significativa”, señaló.
Recordó que estos hechos se repiten desde hace tiempo. La autoridad citó, por ejemplo, que el año pasado se denunció el tráfico ilegal de 450 escarabajos, especie en peligro de extinción.
Con estos antecedentes, el Viceministro solicitó a la Policía reforzar el control en las fronteras del país.
martes, 6 de julio de 2010
Incautan en Chile animales de la selva peruana por un valor de US$ 35 millones
Lima, Perú (AP.Net)// Gracias al sistema de vigilancia que posee la Armada de chile se logró intervenir un bote no registrado que, con sus luces apagadas, se dirigía al puerto de Arica llevando 407 animales de la selva amazónica del Perú en estrechas jaulas dentro de cajas de plátano y en bolsas de redes marinas, según informó el portal Emol.
El chileno Moisés Segundo Díaz Verdugo, ayudante de buzo, tripulaba el falucho "Rosa Isabel", dijo haber zarpado con el cargamento desde la playa peruana Los Palos, 10 kilómetros al norte del límite marítimo. Vendiéndolas en el mercado ilegal de Arica, recibiría unos $35 millones.
Se trata de 18 loros y papagayos amazónicos de seis especies diferentes, una de las cuales, la arawana, está en riesgo de extinción.
Además, 3 tucanes Ramphastus coco, 11 caimanes-bebé (que en pocos años alcanzan 5 metros de largo), 308 tortugas oreja amarilla de río, 40 tortugas de tierra y 27 ardillas sudamericanas, que se veían aletargadas y exánimes.
Moisés Díaz fue detenido por contrabando, comercio de especies prohibidas y maltrato animal. La fiscal Javiera López amplió hasta mañana miércoles su detención mientras decreta diligencias destinadas a desentrañar los alcances de esta red de tráfico animal.
Desde marzo de 2007, el SAG ha decomisado en las fronteras con Perú y Bolivia dos iguanas y una tortuga de tierra y 84 pieles, instrumentos y objetos fabricados con animales salvajes como quirquinchos, serpientes, ñandúes y jabalíes. En abril de 2006 fue el último decomiso masivo, cuando Carabineros de Cuya halló 43 tucanes y loros bajo una carga de flores de un camión.
Ayer, el director nacional del SAG, Francisco Bahamonde, dijo que el servicio "redoblará esfuerzos" para combatir este tráfico ilegal. Los ejemplares fueron entregados ayer al Instituto de Recursos Naturales del Perú, que los rehabilitará y regresará a la selva.
TRÁFICO DE ANIMALES SILVESTRES DE LA AMAZONÍA
Armando Vela Navarro, representante de la Asociación Protectora de Animales y el Ecosistema en Tingo María, denunció un imparable tráfico de animales silvestres de la amazonía, sin que las autoridades de Inrena, Policía Forestal, administradores de empresas de transportes y del Ministerio de Transportes, hagan nada por evitar la depredación.
Vela Navarro precisó que todos los días, diversos especimenes de animales silvestres amazónicos, entre ellos loros de toda especie, gallito de las rocas, monos de todo tamaño y tortugas, por citar solo algunos, son llevados hacia la costa, dejando grandes utilidades a quienes se dedican a este ilegal negocio.
“Lo peor es que este tráfico de animales silvestres se realiza a vista y paciencia de las autoridades de INRENA, de la Policía Forestal, de los administradores de empresas de transportes, del Ministerio de Transportes y otros actores, que nada hacen por frenar la depredación de la fauna silvestre” precisó.
En funcionario alertó que “muchas de estas especies deben ser conservadas porque su caza indiscriminada lleva a su extinción y ello es sumamente dañino para la ecología y el ecosistema, si se tiene en cuenta que estas especies, son los agentes principales de una vida vegetal y animal sostenible en toda la región de la selva”.
“La semana pasada fui testigo de cómo una conocida empresa de transportes que cubre la ruta Pucallpa-Lima, traía en la bodega del vehículo una gran cantidad de loros, de los cuales muchos tuvieron que ser arrojados al río porque murieron de inanición cuando el vehículo quedó varado al producirse un huayco en la ruta” relató indignado.
Por ello reclamó a las autoridades incluir en la lucha contra la corrupción generalizada, este ilegal tráfico de animales y se aplique a los infractores sanciones severas que vayan desde una multa pecuniaria, hasta el encierro por varios años, debido a que el daño es sumamente grave.
“Hay que alertar a nuestras autoridades encargadas del control, poner mano dura frente al caso y evitar la depredación de nuestra selva, la que se agudiza con la tala indiscriminada de especies vegetales, la pesca con dinamita, barbasco y sustancias químicas además de la extracción “indetenible” de madera, unida al narcotráfico” reclamó.
Vela Navarro precisó que todos los días, diversos especimenes de animales silvestres amazónicos, entre ellos loros de toda especie, gallito de las rocas, monos de todo tamaño y tortugas, por citar solo algunos, son llevados hacia la costa, dejando grandes utilidades a quienes se dedican a este ilegal negocio.
“Lo peor es que este tráfico de animales silvestres se realiza a vista y paciencia de las autoridades de INRENA, de la Policía Forestal, de los administradores de empresas de transportes, del Ministerio de Transportes y otros actores, que nada hacen por frenar la depredación de la fauna silvestre” precisó.
En funcionario alertó que “muchas de estas especies deben ser conservadas porque su caza indiscriminada lleva a su extinción y ello es sumamente dañino para la ecología y el ecosistema, si se tiene en cuenta que estas especies, son los agentes principales de una vida vegetal y animal sostenible en toda la región de la selva”.
“La semana pasada fui testigo de cómo una conocida empresa de transportes que cubre la ruta Pucallpa-Lima, traía en la bodega del vehículo una gran cantidad de loros, de los cuales muchos tuvieron que ser arrojados al río porque murieron de inanición cuando el vehículo quedó varado al producirse un huayco en la ruta” relató indignado.
Por ello reclamó a las autoridades incluir en la lucha contra la corrupción generalizada, este ilegal tráfico de animales y se aplique a los infractores sanciones severas que vayan desde una multa pecuniaria, hasta el encierro por varios años, debido a que el daño es sumamente grave.
“Hay que alertar a nuestras autoridades encargadas del control, poner mano dura frente al caso y evitar la depredación de nuestra selva, la que se agudiza con la tala indiscriminada de especies vegetales, la pesca con dinamita, barbasco y sustancias químicas además de la extracción “indetenible” de madera, unida al narcotráfico” reclamó.
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